
Más de 10 horas en la universidad por día durante la semana, un sueño (intento
de pesadilla) que me despertó sudoroso y un fin de semana en el que volví a
probar aquel mundo oscuro que siempre contenemos en nuestras mentes retorcidas.
Había terminado
de comprar el pan de la mañana de la típica tienda de la esquina, de pronto
entra un joven que hábilmente...